Vencer el dragado (cuando la mosca se desplaza a diferente velocidad que la que llevaría si no estuviera sujeta a una línea. O en otras palabras cuando la línea viaja a diferente velocidad que la mosca) es uno de los grandes retos en la pesca a mosca.
Los problemas de dragado aparecen cada vez que lanzamos perpendicular al río. Aunque algunos pescadores defienden la idea de que el dragado no supone un problema en la pesca por debajo de la superficie, no es cierto en absoluto. Cierto es que existen situaciones en las que algo de dragado nos puede venir bien, como cuando pescamos a ninfa en una corriente y le queremos imprimir algo de vida. En general, el dragado es del todo anti natural y deberíamos evitarlo por todos los medios.
A menudo existen diferentes soluciones para el mismo problema. Es interesante observar, cómo diferentes pescadores, se enfrentan al mismo problema y en las mismas condiciones. La manera de hacerlo revela algo sobre su psyche, algo así como el Freud del río (Ah..¡osea que te acostaste con tu madre! Y ese tipo de cosas.
Posando la mosca primero (Lance Tuck):
La pregunta más obvia no es ¿cómo? Si no, ¿para qué? Yo utilizo este lance en dos situaciones:
La primera es cuando pesco en la zona de agua recogida detrás de grandes piedras. Ríos con abundancia de piedras grandes que asoman a la superficie representan un sorprendente acertijo para el pescador. Una solución sencilla para obtener ese tiempo extra de libre deriva en la mosca es la de posar la mosca antes que la línea. Siempre que podamos acercarnos lo suficiente (y a menudo es posible situarnos justo por detrás de las piedras) podemos lanzar nuestra mosca en el sitio correcto intentando mantener la línea fuera del agua. Al final la línea caeá, pero con la esperanza de haber retrasado el dragado de la mosca lo suficiente como para cumplir la misión del engaño correctamente.
La segunda situación no tiene nada que ver con vencer al dragado, sino con crear sonidos atrayentes del tipo ”plop”. Si lanzamos con la intención de posar la mosca antes que la línea, es bastante sencillo aplicar un exceso de energía a la parada y lograr ese sonido. Es similar al sonido que producen pequeños insectos al caer de las ramas al agua en pleno verano. También es útil cuando se produce la caída de cigarras.
Para conseguir que nuestra mosca pose primero, deberemos efectuar un lance recto y vertical por encima de la caña y con un ligero exceso de energía, de manera que cuando la línea se extienda, ese exceso de energía haga que la mosca pique hacia abajo. Este lance se puede mejorar de manera elegante variando la forma en la que aplicamos ese exceso de energía. En vez de parar más enérgicamente, lo que hacemos es parar de manera normal y cuando la línea se esté terminando de extender hacia delante, aplicamos un pequeño tironcito hacia atrás(o hacia arriba) de la punta de la caña.
Aunque se puede disparar línea en este lance, para hacerlo deberás dejar pasar línea entre los dedos y así poder parar la caña antes de aplicar el tironcito a la punta.
Lógicamente no debes realizar ninguna deriva adelante ni acompañamiento de la punta de la caña hacia la superficie del agua, ya que esto anularía el efecto que estamos intentando conseguir.